La isla de Talf es una región al norte de las tierras civilizadas, la cual es el refugio de mutantes y condenados, allí es donde huyen los ladrones, asesinos y prófugos buscados por la ley, un pozo de corrupción y podredumbre, en el que el mal campa a sus anchas, un lugar donde la misma tierra está corrompida. En la isla se encuentra la ciudad de Talf, allí se organizan las bandas mas peligrosas con los criminales mas despiadados, y los mutantes salidos de las peores pesadillas. Pero no solo criminales y mal nacidos son atraídos a la ciudad de Talf, también llegan comerciantes, contrabandistas y aventureros que sin nada que perder, ven en la ciudad un lugar mas donde pueden desempeñar su oficio por un alto coste, debido a los pocos valientes que se atreven a ir. Todo un paraíso para los criminales si no fuera porque reyes, príncipes, duques y diferentes organizaciones religiosas mandan a sus soldados y miembros a la caza de algunos criminales, riquezas o por otros motivos. Miles de individuos viven hacinados tanto dentro como fuera de la ciudad, en casas improvisadas con cualquier material o en edificios que prosperan y que poco a poco forman nuevos barrios alejándose de la peligrosa ciudad y acercándose a la oscuridad de bosques y pantanos. Dentro de la ciudad los edificios se elevan mucho mas alto que las murallas e inclinándose sobre ellas, llegando a unirse entre ellos formando pasillos y túneles oscuros, donde las bandas se agrupan y ocupan diferentes barrios en los cuales, hacen contrabando e imponen sus leyes hasta en la ultima calle, casa o ruina que controlen. Actualmente hay tres Vocales, los cuales hacen el papel de gobernantes en sus distritos a los ojos del pueblo y extranjeros, y ejercen de intermediarios entre las diferentes bandas, al menos aquellas que poseen algo de cordura y se puede negociar con ellas, a los jefes de las bandas les interesan estos Vocales y sus políticas para no exponerse ellos, a peligrosos tratos y reuniones.
